Miuras de pitón a rabo estremecen Villanueva

De izq a der Lamelas,Rafaelillo y Venegas FOTO :Manuel Car

Rafaelillo corta un rabo y Lamelas y Venegas triunfan con una gran corrida de la mítica ganadería

La plaza de toros de Villanueva del Arzobispo es un auténtico bombón. Aquí se viven faenas con una épica de valor y miedo que mide a los auténticos toreros. Ocurrió ayer. Miuras que fueron eso: miuras. De pitón a rabo. Para verlos hubo gran entrada

. Casi tres cuartos de aforo cubiertos por un público que vibró, se estremeció y vio como los toros se crecían y ponían en apuros a los toreros. Como a Alberto Lamelas al que auxilió ‘Rafaelillo’, que en un alarde de capitanía efectiva de cuadrillas dio un recital de arrojo y conocimientos, de estar en el sitio justo, y pudo salvar la cornada y quién sabe si una vida.

Gran tarde la que ofreció el murciano Rafael Rubio ‘Rafaelillo’, que ya con su primero dio muestras de su oficio y capacidad con un toro que se dejó algo por el lado derecho, siendo muy rabiosillo por el izquierdo. Muchas miradas y algunas coladas ofrecieron al público asistente con claridad las dificultades del primer miura.

Alberto Lamelas se gusta con la capa.FOTO : Enrique

Se explayó a gusto con el muy buen cuarto, que desde que salió de chiqueros ofreció oportunidad para que un enrabietado ‘Rafaelillo’ lo recibiera con largas de rodillas y vibrantes verónicas. Fue el principio de una labor muleteril llena de entrega y buen toreo, sobre todo al natural, donde logro muletazos de enorme profundidad y mérito. Llevó largo al miura en series de muletazos de trazo largo, asentado en la arena y encajado en los riñones. Faenón de ‘Rafaelillo’ que remató de una estocada hasta la empuñadura. El premio de las dos orejas y rabo fueron justas al igual que la vuelta al ruedo al gran miura.

Alberto Lamelas confirmó los grandes progresos en una temporada corta pero intensa. Toreó muy bien a la verónica a su primer miura, y lo toreó igualmente bien con la muleta. Una pena que la espada viajara baja, porque pudo haber sido un triunfo mayor. Cortó una oreja y se pudo llevar otra del complicado quinto, toro que ya de salida lo puso difícil cuando atropelló al diestro en el recibo en la puerta de chiqueros.

Hizo un esfuerzo Lamelas sacando momentos lucidos y de mérito, recibiendo otra espeluznante voltereta de la que salió algo aturdido y el toro muy avisado. A partir de ese momento no fue posible nada más que matar, algo que tampoco lo puso fácil el miura, que ejerció efectivamente de miura.

Desparpajo de Venegas

Sorprendió otra vez la claridad, el desparpajo y el valor del diestro de Beas de Segura José Carlos Venegas. Era la primera vez que se ponía delante de una corrida de Miura y se le vio solvente. Al tercero que fue devuelto le sustituyó otro de Miura que tuvo buen tranco y nobleza en su embestida, lo que aprovechó Venegas para cuajarlo ya con el capote y después con la muleta en un trasteo que tuvo importancia. Buenos los derechazos y sobre todo un final de faena en las cercanías del animal con mucho temple y verdad. El sexto que fue un galafate del Conde de la Maza, lo recibió con larga de rodillas y verónicas de la misma guisa. Con la muleta tuvo disposición y claridad de ideas, pero el mastodonte del Conde de la Maza no tenía dentro nada bueno. Tampoco malo. Con ese material destacó la disposición de Venegas que lo mató de forma muy efectiva cortando una oreja que unidas a las dos de su primero le permitía salir a hombros.

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